lunes, 15 de septiembre de 2014

Orden y estrategia en la Empresa Familiar

México.- Sucede hasta en las familias más adineradas. Cuando en una situación se involucra dinero y poder, lazos afectivos y ausencia de reglas, el resultado casi siempre deriva en un enfrentamiento que, en ocasiones, genera el rompimiento de la compañía.
Si consideramos que en México cerca de 95% son empresas familiares —de acuerdo con varios estudios— y que generan más de 50% del PIB en México, la importancia del problema se vuelve capital ya que la mayoría no tiene reglas claras para funcionar. Sólo 45% tiene órganos que permiten aplicar reglas.
¿Cómo establecer el orden?
Se le llama gobierno corporativo y es el establecimiento de lineamientos claros sobre el funcionamiento de la compañía.
La mayoría de las veces se le relaciona con grandes corporativos pero en realidad, atañe a todas las corporaciones sin importar el tamaño o número de empleados y es uno de los principales puntos a mejorar hablando de empresas.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha estudiado el tema y en 1999 emitió los Principios de la OCDE para el Gobierno de las Sociedades, un documento que sirvió de referencia para que cada nación emitiera principios según sus realidades.
Ante esto, en nuestro País el Consejo Coordinador Empresarial publicó el Código de Mejores Prácticas Corporativas, el cual adecúa las mejores recomendaciones para que las empresas instituyan el gobierno corporativo.
El gobierno corporativo no sólo es aplicable en empresas familiares sino que abarca a todas sin excepción.
En el mundo ideal, ¿cómo funciona?
El gobierno corporativo está constituido por el Consejo de Administración y varios comités que ayudarán a éste a trazar las estrategias empresariales —como el de auditoría, por ejemplo— la Asamblea de Accionistas y la gerencia.
El primero es el “espacio donde se define la estrategia, se discuten y resuelven los grandes temas de la empresa, el futuro, las inversiones e incluso el nombramiento y remoción de los directores y gerentes”, según define el estudio “Empresas Familiares en México: El desafío de crecer, madurar y permanecer”.
Este  consejo no opera la empresa, sino que define su estrategia principalmente. Quien operará el día a día será la gerencia. Lo ideal es que en este órgano se incluyan consejeros independientes, es decir, que no tengan ningún conflicto de interés dentro de la organización.
El consejo, a su vez, debe tener varios órganos intermedios que se dediquen principalmente, a tres rubros: auditoría, evaluación y compensación y finanzas y planeación. Éstos ayudarán al Consejo de Administración a desempeñar sus tareas. Éste, le presenta cuentas a la asamblea de accionistas, que está conformada por aquéllos que tienen una inversión en la empresa y es el “órgano supremo”, según explica el Código del CCE.
La realidad
Esta estructura es la base del gobierno corporativo pero, las condiciones en México distan mucho de permitir que todas las empresas lo implementen al pie de la letra. Sin embargo, no hay excusa para no hacerlo, ya que a todos niveles es posible implementar reglas.
En la realidad, éste debe ser simple y sobre todo, ser un “traje a la medida”.
“Gobierno corporativo no es una copia ni una receta de cocina, tienen que mantenerlo simple, hacerlo menos pero que cuide lo importante. Y otra regla es que tiene que ser a la medida porque a lo que cuida es a la familia, y todas las familias son diferentes, simple pero hecho a la medida”, explica Jesús González, miembro de la comisión de gobierno corporativo de Coparmex Nacional y consultor de KPMG.
En este sentido, el Código de Mejores Prácticas Corporativas del CCE, por ejemplo, es una guía para que las pymes mexicanas construyan su manual.
“Las cuatro figuras tienes que adaptarlas a tu realidad. Una empresa con ocho empleados no hace un consejo, pero sí establece que una reunión cada tres meses para hacer un resumen de cómo se ven”, asegura González.
En México, sólo 45% de las empresas familiares tiene establecido un Consejo de Administración, el resto se rigen por administradores únicos, lo que demuestra una “debilidad funcional” de las empresas familiares, ya que no tienen una manera de encaminar su estrategia.
“Esto revela que las decisiones se toman de manera más o menos reactiva, y que probablemente, los socios no se comunican de manera adecuada”, según el estudio “Empresas Familiares en México: El desafío de crecer, madurar y permanecer”.
El especialista asegura que la esencia es poner lineamientos simples en todos los procesos. “Hay que poner reglas claras, por ejemplo, para repartirte las utilidades, que es una pregunta básica tengas 10 o 100 empleados”.
La mortalidad de las empresas por este tipo de situaciones es alta. Por cada seis empresas que se crean, sólo una llega a la tercera generación, esto debido, a la centralización del poder, según datos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros.
En este sentido, la recomendación de la Condusef es la creación de órganos de gobierno que descentralicen el poder y aseguren la permanencia en el tiempo. (El Universal)
FAMILIAS LATINAS, LAS MÁS UNIDAS
“Las familias latinoamericanas son típicamente más largas y por ello, el sentido de familia está mucho más arraigado. De manera que hay muchas empresas de este tipo exitosas en América Latina”, dice Otis Baskin, experto internacional en liderazgo, gobierno corporativo y los procesos de toma de decisiones en este tipo de firmas.  Asegura que el éxito no radica en que han sido beneficiadas con condiciones propicias para hacer el negocio o por el lugar de establecimiento, sino debido a esos fuertes vínculos que existen entre sus integrantes.
“Hemos visto a muchas familias latinas salir airosas de situaciones económicas verdaderamente difíciles gracias a esta base, a este tejido familiar que es el que está siempre apoyando y respaldando”, sentencia Baskin.
El especialista pone como ejemplo a CEMEX, una potencia en la industria mundial de la construcción; considera que esta es una compañía familiar que supo sortear dificultades y se ha posicionado como una red empresarial con presencia en todo el mundo.
“Una de las cosas que podemos decir de este tipo de compañías es que suelen devolver a sus comunidades y a sus países de muchas formas. Por ejemplo tenemos empresas familiares que se dedican a apoyar la educación y que invierten gran parte del patrimonio  de la empresa y de su familia en actividades educativas que favorecen a su comunidad y a su propio país”.
Por otra parte, Otis Baskin, cuenta cómo las empresas familiares buscan apoyo para superar sus conflictos, por lo que añade que es importante siempre y cuando sea conveniente para la firma, que acudan a pedir asesorías para lograr una mejor productividad.
A decir del especialista, en materia de asesoría, resulta mucho más eficaz trabajar con familias que de hecho ya han comenzado a dar pasos para superar esta problemática porque comienzan a entender que hay ciertas cosas que las pueden resolver por ellos mismos y otras en donde necesitan ayuda.
“El objetivo que tenemos cuando trabajamos con empresas familiares es que se vuelvan autosuficientes, de manera que no tienen que tener un consultor permanentemente a su lado. Lo que hacemos es enseñarle a saber hacer ciertas cosas por ellos mismos”. (Agencias)
A SABER
I. Mejora procesos
En un estudio denominado “Gobierno corporativo a la mexicana”, la consultoría PWC enlista 7 aspectos principales que las PyMEs mexicanas deben de considerar para mejorar el desempeño de sus órganos de gobierno y una mejor administración de la empresa. Recuerda que no todos son aplicables al pie de la letra, pero pueden darte una idea de lo que puedes implementar en tu empresa.

II. Directores más responsables
La consultoría recomienda que, tanto el director ejecutivo como el de finanzas, firmen certificados que los hagan responsables legal y penalmente en caso de cometer el delito de falsedad de información. Es necesario que accionistas de las empresas exijan esta responsabilidad a sus principales funcionarios.

III. Consejo de Administración dinámico
La idea es lograr una administración más independiente, es decir, que los consejeros no estén ligados a los accionistas. “El empresario mexicano debe asegurarse de que cuenta con un consejo, en primer lugar independiente, luego sabio y sobre todo, comprometido”, sostiene el documento.

IV. Experiencia financiera externa.
La recomendación es que dentro del comité de auditoría se encuentre un experto financiero para la revisión de todos los números.

V. Información financiera más confiable.
Es necesario implantar un proceso formal de análisis y aprobación de estos informes a través de este experto, el cual debe corroborar la autenticidad de la información.

VI. Coherencia entre compensaciones y desempeño.
La recomendación es la creación de un comité que se encargue de los recursos humanos y particularmente de la compensación de la alta gerencia.

VII. Controles internos eficientes.
Es establecer procedimientos al interior con la finalidad de asegurar la transparencia de los informes de la empresa.

VIII. Mejor cultura corporativa.
Es necesario establecer un código de ética que permita guiar a los miembros.

SABÍAS QUE…
En México cerca de 95% son empresas familiares, de acuerdo con varios estudios, y que generan más de 50% del PIB en México, la importancia del problema se vuelve capital ya que la mayoría no tiene reglas claras para funcionar. Sólo 45% tiene órganos que permiten aplicar reglas.
Fuente: http://www.vanguardia.com.mx/ordenyestrategiaesloquedebeimperarenunaempresafamiliarexitosa-2164660.html

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